Leo
alarmado un articulo de la Vanguardia donde narra que ,hoy, el 35 %
del comercio local de Barcelona, el pequeño, no abrirá sus puertas
en ninguna fase programada por los gobernantes. Simplemente tiran la
toalla definitivamente, para evitar caer en un pozo de endeudamiento
que les arruine sus vidas, más todavía, en el futuro.
Se
quejan de que los gobernantes municipales y de la Generalitat, solo
les ofrecen promesas y aplazamiento de pagos, nada de ayuda
económicas reales para salvarlos. Y encima la mayoría de los
propietarios de los locales ni siquiera les aplaza los
alquileres,sino que se han cobrado estos dos meses del deposito de
garantía preceptivo.
A
nivel local observamos el comportamiento del Govern Municipal con
respecto al comercio local: Unos simples anuncios pidiendo a la
vecindad que compre aquí. Pero eso no basta, esa formula
propagandista se viene haciendo dese hace tiempo, incluso en tiempos
“normales”, y no acaba de funcionar, la gente ha sido alienada
para que consuma en las grandes superficies y le es difícil patearse
los comercios locales.
¿Entonces,
cual es la solución? .
Muy
sencilla: Que el presupuesto de compras de l´Ajuntament, un montón
de Millones de Euros, se quede aquí, en nuestra ciudad. Estamos
hablando de que los proveedores sean colomencs, tanto empresas como
autónomos. Antes, en la época de Lluis Hernández, se intentaba
que fuera así, desde que gobiernan los socialistas esa cuestión
nunca se ha tenido en cuenta cien por cien. Claro que tiene algún
proveedor local, pero nos consta que los que se llevan los mejores
dineros son empresas de fuera.
La
solución que apuntamos es seguro que no va a resolver la crisis del
comercio local, pero estamos convencidos que ayudaría a paliarla.
La
crisis que ha traído la pandémia del COVID-19 , al comercio y a las
clases trabajadoras, es de una envergadura inimaginable, pero tenemos
que ponernos mano a la obra y buscar soluciones imaginativas y
practicas, para intentar sacar la cabeza a flote. Realizar una
vistosa propaganda sin contenidos prácticos solo sirve crear
impotencia y para no evitar que sigan bajando persianas las empresas
y el comercio local.
Efectivamnte, el parón de la actividad económica motivada por el covid-19 ha dejado aún más al descubierto la fragilidad de ciertas economias que, debido a la globalización de la explotación han centrado sus recursos en los ingresos del turismo y de los servicios que este conlleva, pero en lo que concierne al comercio, esta crisis también ha descubierto a un sector de población que la compra on line tiene ciertas ventajas, sobre todo económicas ya que puedes conseguir mejores precios por el mismo producto y, no nos engañemos, la pela es la pela.
ResponderEliminarYo, sin pretender ser pesimista, creo que al comercio le ocurre igual que al mundo natural y su brutal criterio de selección. Ante un desastre, solo sobreviven los individuos más fuertes. En el caso del comercio local sobrevivirán aquellos más especializados que ofrecen atención personalizada, ya que esto es de lo que carecen las grandes superficies y las ventas por internet