La memoria
Rebusqué en la alacena;
rincones empolvados,
recuerdos escondidos:
La abuela,
enlutada ,
meciéndose en el portal,
cansada de esperar la muerte
y aguantando un rosario de quejidos.
Aparece Septiembre ,
regresando a la escuela
a sus viejos pupitres.
Las niñas con las niñas,
mientras, los niños, escriben mensajes
de amor, prohibidos.
Y el hambre perenne,
con deseos febriles de jícara de chocolate,
que acortaba la espera
de las sopas nocturnas
de caldos y de tocino añejo.
Y aparece !!
Esa madurez prematura ,
prendida del pegajoso frio
y de los colchones de paja.
Ai Diciembre,
navidad de los ricos,
inviernos negros
y manos comidas de frío.
De la madre,
removiendo el brasero,
observando el almanaque ,
esperando el regreso del hijo .
La escuela casi vacía,
de niños aceituneros,
que se arrastraban por entre olivares
debajo de sus verdinegras ramas.
La primavera
alboroto y griterío,
con los pupitres llenos
que rompía el vacío de la clase .
Y Mayo,
en el portal blanco de la casa,
las mujeres bordaban;
futuros felices,
de alas voladoras .
El verano,
el silencio de la siesta,
los niños durmiendo
en los duros camastros,
mientras, las madres,
rezurcían gastadas camisas .
La tarde perezosa envolvía,
meriendas de pan negro,
y niñas inventando atalayas
de castillos infantiles.
Y llegaba el crepúsculo,
los gorriones buscaban refugio
en los tejados.
Las novias
se empavonaban sus finos rizos
y los novios se vestían
sus gastadas camisas;
! Ai... Cuanto amor y cuanto padecer,
hoy te quiero, mañana no
y el domingo quizás o tal vez.
Y ,mientras, los jornaleros,
recién afeitados,se arrastraban
por los mostradores de las tabernas,
solicitando al tabernero:
