LOS CURAS OBREROS DE GRAMENET (1)
Josep Catà, (Andreu Alerany), Jaume P. Sayrach, Antoni Antonijoan, Josep Sánchez, Lluís Hernández, (un sacerdote argentino), Salvador Cabré y Joan Morán
L’existència d’una Església militant en els rengles de l’oposició al franquisme, la presència de capellans obrers, de joves seminaristes enrolats en moviments sindicals i secularitzats en els moviments socials, palesa un compromís amb la classe obrera, amb els treballadors, amb els més pobres, al llarg de bona part de la dictadura feixista del general Franco (…) Del llibre
?Curas Obreros? Els seus autors són José Centeno García, Luis Díez Maestro i Julio Pérez Pinillos.
La Iglesia y la política marcaron la biografía de los curas obreros de Gramenet, porque nunca quisieron romper con ninguna de ellas, lo cual les granjeó problemas con la jerarquía eclesiástica . Santa Coloma tuvo un plantel entre los que figuraba los sacerdotes LLuis Hernandez, Catá,Pepe Sanchez,Joan Moran,Jaume Sairach,todos ellos se incorporarón al movimiento de curas obreros,
Decidieron quitarse la sotana, enfundarse el mono para trabajar en la fábrica y renunciar a la paga del Estado. Eran los curas obreros. No cobraban por impartir los sacramentos y encuentran en las parroquias de los barrios un espacio para demostrar que hay otra forma de entender la fe.
En el caso de Cataluña, los curas obreros fueron claves en los años sesenta y setenta en las movilizaciones populares de Sabadell, Terrassa, Santa Coloma de Gramenet, Nou Barris (Barcelona), Badalona y el Baix Llobregat. Muy críticos con la jerarquía de la época, por contemporizar con el régimen dictatorial, supieron conectar con la población de los polígonos recién levantados, reivindicando servicios básicos y ensayando estrategias políticas en la clandestinidad. Dos de esos sacerdotes, Lluis Hernández y Federico Prieto, llegaron a ser alcaldes de Santa Coloma de Gramenet y de Cornellá, respectivamente.
El cura Jaume Sayrach, unos de los curas obreros de Gramenet, con un altísimo nivel cultural, responsabilizó al inmovilismo de la Iglesia del declive del movimiento a partir de 1970. A diferencia de Francia, donde la jerarquía se mostró comprensiva, en España hubo menos entendimiento y esa actitud de la Iglesia oficial fue determinante para que algunos curas obreros se inclinaran por el compromiso político mientras "la dimensión trascendental de la fe se difuminaba", dice Sayrach,
La popularidad de los curas rojos ayudó a estrechar lazos de amistad entre sectores de la población de Santa Coloma nada proclives a votar comunista ni a la izquierda, lo cual, en una época en la que el sectarismo campaba por sus respetos, resultaba demasiado inquietante para sus compañeros de partido.
Tres de esos curas rojos se marcharon al cielo con su Dios: Lluis Hernandez , Salvador Cabré y Pepe Sanchez. Pero todavía nos queda el testimonio vivo de Sairach,Cata,Moran.
Lluis Hernandez pasó su vida entre los desfavorecidos. Crítico con la ostentanción de la Iglesia, militó en la Teología de la Liberación y conoció al Che y llegó a pronunciar sus misas en la discoteca de un barco de lujo. Su domicilio particular era la parroquia del barrio de las Oliveras de Gramenet
Jaume P. Sayrach, sacerdote como él, candidato a las elecciones como él, concejal con él, El sacerdote Sayrach escribíó lo siguiente en febrero de 1979:
"El compromiso al que ahora llega mi compañero no le viene de imprevisto, no es la explosión súbita de una vocación imprevista, o de una su vocación peculiar.Mi amigo llega habiendo hecho un largo camino, de muchos años, siguiendo la línea común que hace más de diez años hizo la Iglesia en Santa Coloma y que ahora sus compañeros de partido al escojerlo, se lo reconocen. Sacerdotes y cristianos interpelados por la cruda realidad que nos rodeaba, desde el corazón de la fe sentimos que no podíamos celebrar nuestra fe en Jesús y la comunión, si esta fe no se traducía en un amor seriamente comprometido con los pobres. El testimonio de los militantes "ateos" que luchaban por los demás, exponiendo su libertad y hasta su vida, era para nosotros, una invitación al compromiso".
