martes, 11 de agosto de 2015

BAN/ BANDO...Si fuera alcalde



     
Article de Fermin Chueco publicado en el Mirall de Agosto-15


BAN/BANDO
 (si fuera alcalde)
Se hace saber que este gobierno municipal, salido de la voluntad popular de Gramenet, ha determinado el cierre definitivo de Gramepark, empresa responsable de la grúa municipal, las zonas azules, los parquings públicos, viviendas, etc. Que el cierre de Gramepark se ha decidido porque la deuda que tiene acumulada, por la mala gestión de los anteriores gobiernos, supera los 30 millones de euros; es decir cinco mil (5.000) millones de las antiguas pesetas. Que en el supuesto de que se hubiera seguido manteniendo la actividad de Gramepark, se hacía necesaria la inyección de otros cinco millones de euros de dinero público anuales, para pagar préstamos e intereses a los bancos, por lo que la deuda de Gramepark se incrementaría de forma escandalosa. Que como alcalde no puedo permitir que las partidas de dinero público destinadas a Gramepark, empresa en fallida económica desde que explotó la burbuja inmobiliaria, sea rescatada con dinero que debe ir destinado a servicios sociales, para atender a las miles de familias que lo están pasando verdaderamente mal. Que este gobierno municipal, con el cierre de Gramepark, quiere “anar per feina” y atajar el despilfarro de dinero público, así como llevarles la esperanza a todas las vecinas y vecinos de la ciudad que nos lo solicitan. 
 Fermín Chueco Colaborador

domingo, 9 de agosto de 2015

Lectura de verano: La primera cita




LA PRIMERA CITA  (3)





Caty había llegado al Kent cinco minutos antes que el Joan, por lo que le dio tiempo suficiente para elegir mesa cerca de la puerta de entrada del local. Dejó caer su juvenil bolso rojo sobre la mesa y se sentó en una de las  sillas. Pasado un rato, viendo que el Joan se demoraba, se levantó, volvió a coger el bolso y se dirigió a los aseos de mujeres del bar, quería asegurarse que el rimer que se había puesto en casa, y los   cabellos, se conservaban perfectos.
Joan, muy a pesar suyo, había llegado diez minutos tarde a la cita con Caty en el Kent. -La primera cita que tengo con una chica y ya la he fastidiado-se dijo para sí. Se alegró de no  tropezar con ningún compañero de la universidad, así evitaría pasar por tener que dar explicaciones de que hacía un chico de Santako en el barrio pijo de la Bonanova. Como la puerta del bar estaba abierta se dirigió  directamente a la barra, para desde allí buscar la figura de Caty.
Caty ,cuando salía del aseo, miró su reloj y se extraño de que el formal del Joan llegara tarde.


- Esperaré cinco minutos más, y  si no está aquí me marcho,-se prometió asimismo. Pero al dirigirse hacia la mesa, que ya antes había ocupado, lo divisó de espaldas apoyado en la barra del bar. De forma sigilosa se dirigió hacia donde estaba Joan, quería realizar la típica broma de taparle los ojos, para después preguntarle: ¿Quién soy?.
El Joan sintió como unas delgadas y suaves manos lo dejaban ciego completamente. Y antes de responder  a la pregunta que le realizó Caty, cogió las manos de ella, al instante que le piropeó: Eres la mujer más bella de todas las chicas de tu edad.
La Caty y el Joan se dieron un par de besos en las mejillas, mientras se reían de la ocurrencia de ella.
-Aún me pregunto porque he venido – exclamó el Joan
-Querido Joan-le sonrió Caty , mientras posaba su mano sobre la de él.
-De vez en cuando suceden estas cosas – se adelantó Caty. Odio a los previsores, quiero vivir el momento que soy feliz.
-Pero ¿ porqué conmigo?, si tienes un montón de amigos de la Bonanova -le lanzó de forma directa el Joan.   
-Porque tú…. eres diferente, Joan. Eres …como digo el filósofo: La perfección andante –dijo ella con la sonrisa en los labios.
El corazón de Joan latía descontroladamente, todavía no se podía creer que la chica más guapa de su clase lo hubiera elegido a él.
-¡Ah…! exclamó Caty, soltando una carcajada. Por eso me gustas, porque tu sinceridad siempre me llamó la atención.
La mano de Caty seguía cogida a la de Joan, pero ella la fue soltando de forma sigilosa, al notar que la de él estaba sudorosa. Los nervios le habían delatado-pensó. Y aprovechando la ocasión
ambos empezaron a preguntarse cómo habían transcurrido los exámenes finales.
Joan, aunque conocía muy poco a Caty, leía en su rostro y en su voz que la cita transcurría felizmente para ella. Pero durante todo el tiempo no paraba de hacerse la misma pregunta ¿  porqué ella, hija de no sé que importante familia barcelonesa quería compartir una tarde con un vulgar hijo de botiguer del extrarradio?.
-Prefiero conversar contigo, que aburrirme  con otros chicos socialmente superiores- le cortó de raíz Caty.
Joan se sintió un poco avergonzado por exteriorizar sus perjuicios y resbaló su mano hacia la de Caty ,solicitándole disculpas por su torpe proceder. Era la primera vez que se atrevía a tocar, por iniciativa propia, la mano de una mujer, por lo que sintió un gran escalofrío por todo su cuerpo.....Continuará     



viernes, 7 de agosto de 2015

LECTURAS DE VERANO. ..Por fin llegó el...amor(2)

Por fin llegó el...amor  (2)



El  smarphone de Joan emitió el clásico  clinc que recepcionaba un whatsapp.-Que extraño,¿quien será?, i si yo solo recibo mensajes de tarde en tarde -se dijo asimismo. Para  salir de dudas alcanzó el terminal y, después de poner contraseña para abrirlo, pulsó el icono de la aplicación verde. Enseguida descubrió quién era el remitente, mejor dicho la remitente: Era Caty, una compañera  de clase, con quien  si apenas mantenía  contacto, justo el de saludarse todas las mañanas al entrar en clase.
-Hola Joan estás por ahí –decía el escueto mensaje de Caty.
-Si, hola ¿que tal, Caty? -escribió  Joan con dedos temblorosos en el smarphone .
-Que estaba aburrida y quería invitarte a tomar algo esta noche en el Kent-respondió Caty al instante. 
Al Joan,  sorprendido por la invitación de Caty, le entraron sudores nerviosos porque le asaltaron todas las dudas del mundo; ¡no  sabía qué respuesta darle¡.
-Tengo que mirar a ver si quedé con alguien- Le respondió Joan para ganar tiempo.
-Espero durante un rato tu respuesta, si no tendré que cambiar de planes-Le respondió de forma seca Caty.
Joan abrió de par en par la ventana de su habitación; necesitaba oxigenarse rápidamente, Caty le había absorbido de un golpe  toda su capacidad pulmonar. No habían transcurrido apenas tres minutos desde que Caty le urgiera  a responder que cogió  el terminal y, con igual  seguridad a la que solía  enfrentarse  a los difíciles  exámenes de telecos, empezó a escribir en el teclado digital.
-Hola Caty, ¿a que hora quedamos en el Kent?-le envió por el  whatsapp.
 Caty, mientras  aguardaba la respuesta del Joan, seguía consultando su agenda de contactos , intentando seleccionar a otra víctima propicia, por si el tímido del Joan le daba calabazas.
-¡Que bien Joan !-le respondió Caty, adjuntando un emoticono sonriente.
-¿Te parece bien a las 20,30h?- Le propuso Caty al Joan.
-Por mí perfecto –Escribió el Joan.
Caty le envió al Joan un último emoticono con el significado de; ok, hasta después.
Loren, la madre de Joan, se extrañó bastante de que su hijo le solicitara con urgencia que le preparara el pantalón tejano y el jersey Lacoste color verde.
-Mamá son las siete y media y tengo que estar dentro de una hora arriba del todo de la calle  Muntaner. Piensa que desde Santa Coloma hasta allí, si no tengo contratiempos en los transbordos del metro  voy  con el tiempo justo -Le urgió Joan a su  madre.
-Pero …¿qué mosca te ha picado hijo?-Le interrogó su madre extrañada.
-Verás mamá ..he quedado con unos colegas para pasarnos unos apuntes, que como ya sabes el otro día, cuando fuimos al dentista, perdí la clase de propagación de ondas digitales.-Mintió piadosamente a su madre.
Loren, la madre del Joan, quedó tan  extrañada de la respuesta de su hijo que enseguida dedujo de que su éste no decía la verdad.
-Que raro en ti Joan, quedar con compañeros para el tema de apuntes; tú siempre que has faltado a una clase le has solicitado, directamente,  a los profes  que te pasen el tema por email.-Provocó  Loren a su hijo para sonsacarle la verdad del porqué de tanta prisa .
-Basta de dudar de mí ,mamá,-Le recriminó Joan. -He quedado con el Toni que es el empollón de clase ,porque éste copia hasta los acentos en todas las clases.
-De acuerdo hijo, de acuerdo, ya eres bastante crecidito para saber lo que te  haces,-Intentó  apaciguar el desconocido  mal genio de su primogénito.
El Joan empezó a vestirse de forma tranquila pero con movimientos ágiles y precisos, estaba ensayando que no debía emitir ninguna señal que demostrara que sentía terror pánico en acudir a la cita con Caty. Esperaba, sin embargo, no venirse abajo en el último momento, por lo que quería mantener la calma a toda costa. Se despidió de su madre, advirtiéndole que no lo esperara despierta, ya que no podía asegurarle a qué hora regresaría. Ella se limitó a darle un suave beso en la mejilla y a decirle que cuando subiera al metro tuviese  cuidado con el móvil y la cartera, ya que había leído en el Facebook que los carteristas se aprovechaban de los pasajeros despistados.
El Kent era una moderna cafetería, situada en la barcelonesa calle de  Muntaner, a la altura de Via Augusta. Abierta  hace décadas por la familia Puig Reverte. El Kent había conseguido mantenerse como bar de moda durante tantísimo tiempo a base de realizar continuas innovaciones  en su diseño y en la oferta de los mejores cocktails y el exquisito servicio de cocina rápida. El Joan no había estado anteriormente en el Kent, pero sabía de su existencia por los comentarios que hacían de él algunos  estudiantes que vivían cerca del establecimiento y que lo frecuentaban con asiduidad. Por lo que no le  extrañó su majestuosa decoración, a base de grandes placas  de madera, grises y marrón oscuro. Su iluminación era brillante, pero con un tono frio, que le daba un aire de transparencia y de salubridad envidiable. El aspecto general de la cafetería le era familiar, pues le recordaba bastante a como estaba decorado el salón comedor del Lluerna, restaurante con estrella Michelin, en el que sí había estado varias veces en compañía de sus padres.  
 Caty había llegado al Kent cinco minutos antes que el Joan, por lo que le dio tiempo suficiente para elegir una mesa cerca de la puerta de entrada del local, con la intención de divisar a Joan ,su nueva posible conquista...Continuará

jueves, 6 de agosto de 2015

Lecturas de verano..Por fin llegó....el amor



Por fin llegó….. el amor (1)

El Joan era demasido tímido para sus recién cumplidos veinte años. Mientras sus colegas de universidad esperaban la llegada del viernes como algo especial para darle suelta y desenfreno al sexo y el alcohol, él prefería quedarse en casa y matar el tiempo frente al ordenador o leyendo un buen libro.
Loren, la madre de Joan,  estaba preocupada por la actitud pasiva que su hijo tenía en lo referente a la diversión . También le preocupaba que todavía no hubiera traído a casa a ninguna chica de su edad; ni como amiga, y como novia menos. Pero por otro lado, como madre, estaba orgullosa de que su hijo fuera buen estudiante y mejor hijo. Conseguir un hijo perfecto era imposible –le había asesorado Lluis el psicólogo de la familia- y menos en los tiempos que corrían; donde, bajo su óptica de madre sexagenaria, el mundo era un peligro  constante, sobre todo para los adolescentes, ya que estaban expuestos a miles de peligros y tentaciones; como el abuso del alcohol y  la ingestión de todo tipo de drogas.

Caty era una colega universitaria del Joan, que al igual que él no llegaba a los veinte y un años de edad. Al contrario que al Joan, a Caty se le despertó el instinto sexual demasiado temprano, porque sin cumplir apenas los  dieciséis ya experimentó el sexo con unos de sus primos, durante las fiestas  del pueblo de sus padres, en la provincia de Zamora, al que solían ir de  vacaciones cada Agosto.

Caty era excesivamente liberal para su corta edad, por lo que no tenía excesivos problemas para cambiar de chico. Ella necesitaba experimentar nuevas sensaciones, por lo que le llevaba, continuamente, a fijarse en chicos atractivos, no para hacer proyectos de largo alcance sino para aumentar su colección particular de conquistas.
Joan no ponía excesivo interés en prefabricarse, en el cerebro, un modelo de mujer para su futuro. Tenía claro que la chica que le llamase la atención debería surgir de forma espontánea. No sabía dónde ni cuando. Él se sentía lo suficientemente seguro para poder decidir cuando llegaría ese momento. Ahora había decidido centrarse en  su  estudios, por lo que le dedicaba demasiado tiempo a preparar los exámenes, para evitar no repetir ninguna asignatura.
Loren alababa  la sensatez de su hijo, si embargo echaba a faltar que éste no quedara con los amigos para divertirse los fines de semana, cosa natural de la juventud, por lo que no desaprovechaba la ocasión para recordárselo. Pero lo hacía con tiento, tampoco quería abrumarlo con sus consejos. De vez en cuando le animaba a que telefoneara al Enric y al Fonsu, sus dos mejores amigos desde la niñez, para salir con ellos. Pero su hijo siempre le respondía negativamente; -Mama a ellos les gusta solo la música reggae y a mí no me dice nada.-Le argumentaba siempre  a su madre.
Caty estaba tumbada encima de la cama de su habitación repasando los contactos del wassap de su smarphone . Por aquellos días había roto con su última conquista, por lo que solo pensaba en su próxima presa amorosa. Repasaba, una y otra vez, todos los perfiles masculinos de su agenda y no acababa de decidirse por ninguno, a casi todos les ponía pegas: Este es bajito, el otro demasiado heavy, aquel  demasiado gordito, al Jonathan, que le llamaba más la atención, acababa de iniciar una nueva relación con la Petra, la empollona de clase. –Uff… que difícil me lo estáis  poniendo.-resoplaba, cada vez que descartaba algún chico….Continuará

miércoles, 5 de agosto de 2015

LECTURAS DE VERANO:Un cuento….abuelita



     Un cuento….abuelita
A Julia le costaba dormirse. La energía gastada durante el día no era suficiente para que llegara rendida a la hora de dormir. Vueltas y más vueltas luchando contra el sueño hacia que su pequeña cama se volviera un pequeño remolino.
A la abuela Fanny le daba cada vez más pereza contarle la  retaila de cuentos, clásicos e inventados, que Julia le solicitaba  cada noche. Pero Fanny sabía que no tení otra opción. Estaba obligada a  recitarle  a su nieta  los cuentos de la Caperu
cita, de Blancanieves, de los Tres Cerditos …o había niña despierta para rato.
Muchas veces Fanny conseguía dormirse antes que su nieta, lo que producía el enfado de la pequeña. Y ésta, no soportando que la abuelita dejara de contarle más cuentos, le prendía su mano y con todas sus fuerzas  la zarandeaba para que se despertara.
Fanny tenía una inmensa vocación por su nieta. Y durante todo el día le dedicaba toda la atención que Julia le solicitaba, pero cuando llegaba la noche , y con sus  fuerzas físicas agotadas, debía realizar un  sobre esfuerzo para conseguir que la niña, por fin, consiguiera coger el sueño.
  La táctica de Fanny para conseguir vencer a Julia, en su lucha para que se durmiera lo antes posible, era empezar la  lectura por los cuentos clásicos que tenía más memorizados. También utilizaba la técnica de que fuera Julia la que relatarse los cuentos; cuanto más esfuerzos realizara la niña antes caería rendida.
Las tácticas empleadas por Fanny, a veces, daban un rápido resultado, porque  no habían transcurrido ni tan siquiera cinco minutos cuando Julia ya dormía  plácidamente . Otras, sin embargo, Julia se resistía a ser vencida en su lucha para no dormirse y le solicitaba, una y otra vez, a la abuelita que le contara más y más cuentos, llegando a exasperar a la tranquila y paciente abuela.
A  Julia la sucedía los mismo que a casi a todos los  niños de su edad; que no entendían que existiera la noche para descansar, para ellos la hora de dormir era como un castigo que le impedía seguir jugando las veinte y cuatro horas que tenía el día. Por lo que es de imaginar que los inventores de cuentos, para intentar doblegar a la canalla infantil, fueran los primeros creadores de la literatura infantil.
A Fanny , la abuela de Julia, le encantaba disfrutar de su amada nieta, pero ella debía de cumplir las normas recomendadas por la madre de la criatura, que no eran otras que la niña debería marchar a la cama como máximo a las diez de la noche, ya que para rendir óptimamente, al día siguiente, en la escuela, Julia debería descansar un mínimo de ocho horas seguidas. Es por lo que Fanny    disponía de todo un arsenal de cuentos y fábulas para niños, preparados para  cuando su nieta le dijera: -Un cuento abuelita.