Estos días
vamos a celebrar el 40 aniversario de un deseo colectivo. También juraremos,
ante el oráculo de la moral, que prometemos seguir, el tiempo necesario,
defendiendo que Can Zam debe convertirse en el gran parque de Gramenet. Lo aprovecharemos para cargarnos de argumentos con futuro, e incorporar otros
concepto más convincentes, como los de que somos la única ciudad de Catalunya
que todavía no tiene ese gran parque urbano.
Cuatro
decenios escribiendo en clave verde y ecológica; esperando ablandar las mentes
cementeras de sus señorías, sin tener resultados positivos, te lleva a
cuestionar esos aires de cambio que anuncian…. mediáticamente.
Será un
aniversario triste y lleno de incertidumbre, porque es injusto que ahora
tengamos que volver explicar los
argumentos, cuarenta años después, a los promotores y seguidores del
Rock Fest, aquellos mismos que ya explicamos
a los seguidores de Justo Molinero y a los amantes de la Feria de Abril: “Que es preciso, necesario y casi
obligatorio, sacrificar una semana de fiesta de un colectivo, a
favor de que todos los colomenses disfruten durante todo el año el necesario
pulmón verde de Can Zam.
El gobierno municipal debería reaccionar de
forma rápida y complaciente a una
reivindicación que dura ya demasiado tiempo.
Todo lo que se sea darle largas y resguardarse en subterfugios de
eventos musicales, o de cualquier otro tipo, no hará sino provocar absurdos e
inútiles enfrentamientos socio culturales entre los amantes del gran parque y
los amantes de la música moderna.
FERMIN
CHUECO ARTERO
No hay comentarios:
Publicar un comentario